jueves, 16 de diciembre de 2010

Objetivos para una politica

La investidura como presidente de la Generalitad de Artur Mas inicia un periodo de tiempo en el terreno político que ha de tener una trascendencia en el terreno económico y social de Cataluña,

La trascendencia viene determinada, a pesar de la campaña electoral y de sus habituales promesas, por la realidad de todo el conjuto de cuestiones que se presentan frente al presidente. No hay una sola realidad; hay muchas . Algunas tienen un horizonte económico; otras de carácter social y todas coinciden en el comienzo de un camino cuyo recorrido será de cuatro años. Es un tiempo importante para Cataluña.

No es cierto que sean solo problemas del ámbito de Cataluña. La visión de los mapas meteorológicos no es cierta y ha conducido a una notable confusión en la esfera de su delimitación. Los vientos, las nubes y las tempestades no se inician, ni se acaban en los habituales mapas del tiempo donde se limita axpresamente el ámbito geográfico de los llamados paisos catalanes. Todos los problemas, externos e internos de Cataluña, tienen un caracter honogeneo, diga lo que diga, con el resto de España. No se trata al país como un trozo de queso, separándole del resto con un tajo de cuchillo. Ni es posible, ni es aconsejable.

La expectativa es saber lo que piensa hacer Mas. Y saber si ha estudiado todas las posibilidades de recuperación económica. Y si será el hombre que marque las pautas de toda la andadura de todos los que vivimos en Cataluña y las expectatibas de todos los que en el resto de España miran a Cataluña, con interes siempre, y con afecto redoblado.

La debilidad del gobierno Zapatero, practicamente detectable con abrir los ojos, o tambien casi semicerrados, no es una buena garantía de que las cosas bavan a ir mejor. Un gobierno de España flojo, debitatibo,incierto. y ensimismado es tan malo paraEuropa, para España .como una Cataluña ensimismada.

Es necesario verlas venir. Todas las opciones. Las de Catalulña, en primer término, pero una Cataluña que siempre ha demostrado conocer su papel dirigente y diligente en la politica española.Olvidese el victimismo. Olvidese los tratados exotericos de no saber hacia donde se camina. Asi acabó el tripartido.

Hay que confiar en que Artur Mas no seguira la equivocacion del tripartido. Al menos eso le han dicho los votantes.

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